Historias de Frailecillos

Rodiles ayer, a primera hora de la mañana. Al fondo, Tazones.

 El otro día realizaba desde este blog una sugerencia para el fin de semana; un amable lector anónimo me hizo caso y me comenta que en su paseo por Rodiles se tropezó con el cadaver de un Frailecillo atlántico (Fratercula arctica, Flairín). Ayer hasta allá nos fuimos y dimos con él.

El Frailecillo es un ave marina que se distribuye por las costas del Atlántico norte y el Ártico. Su presencia en nuestras costas es más bien escasa, pasando su estancia invernal en el mar, a buena distancia de la costa. Cuando aparece en las playas casi siempre tiene relación con problemas de salud y/o contaminación petrolífera. Por poner un ejemplo, en el suceso del petrolero Prestige, tras Araos y Alcas, el Frailecillo fue la siguiente especie más afectada, si atendemos al número de ejemplares recogidos en las costas, tanto vivos como muertos.
Este invierno y sobretodo los últimos días, están apareciendo bastantes cadáveres orillados por todo el Cantábrico.

Hace muchos pero muchos años, un amigo encontró un ejemplar vivo, aunque manchado de petróleo, en la playa de Rodiles. Vivió semanas como un rey en la bañera, en una caja de cartón y dando paseos y baños en la playa. Por algún rincón debe haber una pequeña caja amarilla de diapositivas con alguna fotografía en Rodiles, del amigo y del Frailecillo.